Uno de los mayores estandartes que ha levantado Apple en los últimos años es la defensa privacidad en el mundo online, lo que llevó a la empresa a lanzar una serie de recursos destinados a bloquear el seguimiento de las actividades de sus usuarios en Internet, como la aplicación Tracking Transparency (ATT) o, en buen portugués, Transparencia de la supervisión de aplicaciones.
Por supuesto, esto ha molestado mucho a las empresas cuyo modelo de negocio se basa en recopilar datos de los usuarios de sus productos, como Google y Meta. Sin embargo, según un informe de The Information, en muchos casos esta filosofía también ha dificultado el desarrollo de los servicios de Ma.
El vehículo explica que la intransigencia de Apple en el asunto ha impedido que la compañía «copie» características famosas de productos y servicios de la competencia que se basan en algoritmos de recomendación cada vez más precisos.
Uno de los mayores ejemplos es Apple TV+, que a diferencia de Netflix, por ejemplo, no recopila datos sobre la navegación de los usuarios por el catálogo de servicios, lo que impide que la empresa recomiende contenido similar al último visto.
Según informes de ingenieros, en 2019 Apple incluso estaba trabajando en una nueva función que permitiría al usuario comprar aplicaciones de la App Store a través de Siri. Sin embargo, el proyecto se canceló después de que los ingenieros de la compañía no pudieran encontrar una solución para evitar que los comandos de voz se vincularan con la ID de Apple, lo que podría abrir brechas de seguridad.
Otro informe nos retrotrae a 2015, cuando Apple estaba trabajando en una nueva función para la aplicación Fotos que enumeraba cronológicamente los lugares visitados por el usuario y las fotos tomadas en esas áreas. Sin embargo, el equipo de privacidad de Ma vetó la herramienta, diciendo que podría ser utilizada por gobiernos autoritarios para verificar dónde ha estado el usuario.
La falta de recursos en Maps, por ejemplo, también sería consecuencia de esta política, mientras que servicios de la competencia como Google Maps utilizan los datos recopilados para desarrollar nuevas herramientas de navegación.
Finalmente, el informe dice que incluso los ingenieros de privacidad jóvenes tienen el poder de rechazar proyectos que presenten riesgos potenciales para la privacidad.
Uno de los casos más recientes se refiere a la función «Levantar para hablar» del Apple Watch, que ha generado preocupación al recopilar datos del acelerómetro y el micrófono. La función permite a los usuarios activar Siri simplemente levantando el brazo.
Por un lado, la posición de Apple seguramente atraerá a un gran número de consumidores que simpatizan con sus promesas y desean la mayor privacidad posible en Internet. Por otro lado, precisamente por eso, son estos consumidores los que se privan de buenas instalaciones para su vida diaria.